El movimiento social Frente Popular Dario Santillan (FPDS), junto a sus compañeros del FPDS Corriente Nacional, con trabajo militante en diversos barrios y asentamientos de todo el país, se movilizaron hoy en reclamo de “salarios dignos, basta de ajuste, despidos y suspensiones, y abajo el tarifazo”. También rechazan la represión y judicialización de la protesta social.

En Necochea se concentraron en avenida 59 y calle 62 donde las militantes del barrio Campana, y de Villa Palito de Quequén volantearon a la gente que concurrió por la mañana al centro local.

Mailén y Fran, jóvenes militantes de Corriente Nacional, hablaron con NdeN y contaron la situación en los barrios de Necochea y Quequén donde participan.

"La situación es que, si bien en el barrio Campana el trabajo ya tiene algunos años, mediante los planes sociales conseguimos armar dos cooperativas de trabajo, que se piensan como salida laboral para los y las vecinos y tambien para los y las precarizados. Es un plan que nos sigue precarizando porque son 4 mil pesos por mes que no alcanzan para nada, pero sabemos que hay que disputárselo al Estado porque es presupuesto para los ciudadanos", explicó Mailen. Y agregó: "saliendo a la calle como hoy podemos seguir exigiendo que se cumplen nuestro derecho como ciudadanos y ciudadanas que es el acceso a un trabajo digno".

"La China", como la conocen en el barrio, contó que "este verano empezamos a ir a Quequén, las vecinas tienen mucha predisposición para hacer las asambleas, se acercaron compañeras con hambre, con necesidad de trabajo y algunas que estaban incluso en situación de calle". "Hoy vinimos con las vecinas de Quequén, porque en la última tanda que bajaron, de las 15 compañeras, entraron 4 o 5 nomás a la cooperativa".

Otro jóven militante de barrio, Fran, contó a NdeN en el boluevard de 59 y 62, que "estuvimos toda la mañana acá, nos repartimos en distintas esquinas y dimos volantes en contra de las políticas de ajuste de Macri; algunos pocos se acercaron pero la mayoría seguían caminando".

Fran explicó los espacios que trabaja este movimiento social en nuestra ciudad: "El FPDS CN tiene este espacio territorial, también el espacio de Géneros, que acompaña casos de violencia de género y pide políticas públicas a la Municipalidad; también el espacio de cultura que entre otras cosas organizamos talleres en el barrio Campana, abierto a todo público y gratis, de teatro, albañilería, carpinteria, cocina, y muchos más.

 Finalmente Mailén contó que en Quequén se está garantizando un merendero para los hijos de las vecinas, "pero todavía no conseguimos un espacio en el lugar, a diferencia del barrio Campana, que ya hace cuatro años que tomamos la vieja fábrica de cerámicos".

Sobre los alimentos que envía el Estado desde hace varios años para los comedores barriales, Mailén explicó que "la repartija de alimentos del estado acá nos está llegando bien, pero sabemos que en muchas provincias del país no están llegando. Y el ajuste de Macri cada vez nos complica más a todos, cada vez hay más gente que acude al barrio a pedir ayuda. A pesar de que no somos una movimiento asistencialista, sino que queremos generar organización.

Una movilización en todo el país

El acuerdo al que habían llegado gobierno y movimientos sociales era la aprobación de la Ley de Emergencia Social que ayudaba a paliar de manera momentánea la situación de miles de trabajadorxs de la economía popular, y se creó el Salario Social Complementario, asignando una asignación por la mitad del mínimo vital y móvil.

Sin embargo denuncian que más de dos mil familias ingresadas en los programas lanzados por el gobierno aún no cobran y no hay respuesta sobre esta situación.

“Los y las trabajadoras precarizadas que no estamos contenidas por las estructuras sindicales necesitamos respuesta a los tarifazos, el aumento de la canasta básica, la precariedad del trabajo en nuestro país que afecta a millones de varones y mujeres, a la ausencia de derechos básicos como la tierra, la vivienda y la salud".

“Ante las promesas incumplidas de pobreza cero del Gobierno y la falta de políticas públicas que apunten a mejorar la calidad de vida de lxs mas excluidxs” Explican que durante estos últimos días son varios los datos expuestos que “dejan al descubierto el aumento de la pobreza en la población general y en la infancia y la juventud en particular”. Y que el gobierno “pretende fijar un aumento del salario mínimo vital y móvil en un 20%, llevando el monto a poco mas de 9000 pesos, dejándolo aún por debajo de la línea de la pobreza”.