La represión ejercida contra los trabajadores municipales que se movilizaron ayer dejó abierta varias interpretaciones sobre la responsabilidad de los hechos.

Horas después de lo ocurrido, el foco de los cuestionamientos se ubicó en la policía bonaerense ya que desde el Ejecutivo municipal salieron a negar haber dado la orden de reprimir con gas pimienta a los empleados públicos.

Durante la conferencia de prensa de ayer, el intendente Facundo López fue contundente: "En ningun momento di ningun tipo de orden para un accionar de la fuerza de esa naturaleza".

En ese sentido, el jefe comunal repuso: "Hemos tenido un montón de manifestaciones a lo largo de estos dos años y medio que han movilizado un monton de personas y han estado al frente del palacio municipal y los hemos atendido. Hoy (por ayer) no fue la excepción, ya que ocho o nueve personas ingresaron para discutir con los funcionarios para resolver el conflicto que es un conflicto de retraso en el pago".

Cabe mencionar que ante la versión planteada por el ejecutivo municipal, desde la Departamental de Necochea no salieron a emitir ningún tipo de aclaración o posicionamiento respecto a su intervención, de mínima, desafortunada. Sobre los relatos y posiciones públicas los focos apuntan a las fuerzas de seguridad hasta tanto estas no den su versión de los hechos.

Por otra parte, López tampoco cargó las aguas contra el sindicato y dio a entender que parte de los incidentes esten motivados por sectores que no tenían que ver con la movilización. "Terminar con dos empleados hospitalizados no es lo que busca al gremio y responde a personas aisladas que no responden al gremio", concluyó.