El fiscal platense Álvaro Garganta decidió enviar a juicio oral por dádivas al exgobernador Daniel Scioli y a varios funcionarios más de su gestión, así como al empresario Ricardo Estanislao Miller.

La causa se inició son una denuncia de la diputada Elisa Carrió por lavado de dinero, pero el fiscal decidió avanzar en los delitos de negociaciones incompatibles con la función pública y tráfico de influencias. 

Más allá de Scioli y Miller, también irán a juicio el exjefe de Gabinete de la Provincia Alberto Pérez, su segundo conocido como el hombre del dragón Walter Carbone; el ex director de Aguas Bonaerense Gullermo Scarcella, el ex ministro de Salud Alejandro Collia.

El foco del juicio apunta a las adjudicaciones que el gobierno sciolista dio de nueve obras públicas para construir Unidades de Pronta Atención por $ 117 millones. El beneficiario fue el empresario Miller, quien luego le compró un terreno en Villa La Ñata -donde vive Scioli- y con el que tenía una relación personal y comercial. En el escrito el fiscal considero que Scioli recibía "dádivas" de parte del empresario. 

Según la investigación, antes de comprar el terreno en 2017 por US$ 3.850.000, Miller le alquiló el predio de 41.000 metros cuadrados en Villa La Ñata al entonces gobernador para montar un supuesto emprendimiento hotelero. Por administrarlo y gerenciarlo le pagó $4.464.960 en 60 cuotas mensuales.