Este jueves 21 de julio habrá encuentro entre las 15 y 17hs. en el Centro de Jubilados y Pensionados Municipales de 63 2176 entre 48 y 50 (al lado del Agostini).
El espacio es gratuito y abierto a toda la comunidad que necesite consultas respecto a su salud mental o la de los suyos.
Desde NdeN hablamos con Victoria de la Llosa, jefa de servicio social del Hospital Taraborelli quien introdujo presentando su profesión: “Como Trabajadoras Sociales (T.S) que desempeñamos nuestra labor en el campo de la Salud, específicamente de la Salud Mental, identificamos la ausencia de espacios de acompañamiento a referentes vinculares de personas que presentan algún padecimiento subjetivo”, dijo respecto a la vacancia de este tipo de espacios en Necochea.
Explicó que existe la intervención con familiares en el Taraborelli y desde los dispositivos de internación/externación/consultorios externos donde se ejerce la profesión, pero las mismas se abocan a un objetivo y estrategia dentro del proceso de salud-enfermedad-atención-cuidado. “Visualizamos esta necesidad de acompañamiento desde los diferentes espacios de atención que nos encontramos trabajando, ya sea en la atención espontánea cuando familiares se acercan a consultar cómo iniciar un tratamiento, cómo realizar una internación o acompañar a un amigo o amiga en el cuidado de su salud, entre otras tantas consultas”, explicó como ejemplos de cuándo alguien se acerca a pedir ayuda.
Por ese problema y con el interés de mejorar las condiciones del vivir diario, de los procesos de atención y cuidado las T.S se propusieron llevar adelante esta serie de encuentros grupales con familiares, amistades y/o referentes afectivos de personas con padecimiento subjetivo: “Esto nos permite brindar un espacio de diálogo, escucha atenta, problematización y reconocimiento, donde las personas se sientan cuidadas para relatar sus vivencias, historias, saberes e inquietudes en torno a la temática antes mencionada”. Así se van “generando oportunidades de encuentro, donde las experiencias y vivencias puedan ser herramientas para otros/as”.
En ese sentido adhieren a la Ley Nacional de Salud Mental y la Convención Internacional de Derechos de las Personas con Discapacidad, y por ello consideran que estos espacios de construcción colectiva con familiares y referentes vinculares, posibilitan “repensar y generar nuevos sistemas de apoyos, derribar barreras simbólicas y materiales, tanto de las personas que padecen como de su entorno, acompañando a quienes cuidan”. “Apostamos a propiciar espacios que sean multiplicadores de derechos, facilitando la intersectorialidad, el trabajo en red y comunitario”.