La acción irresponsable ha sido condenada por la comunidad, que muestra su repudio a través de las imágenes compartidas por el grupo La Costa Quequén.
Las fotografías revelan la magnitud de la intervención no autorizada en este espacio común, conocido por ser un lugar de recreación y esparcimiento para los habitantes de Quequén. Este acto refleja la falta de respeto y consideración por los bienes públicos y la convivencia ciudadana.
Ahora, la tarea será restaurar y limpiar las pinturas que han manchados monumentos y mobiliarios de la plaza. Este tipo de actos no solo afecta la estética de la ciudad, sino que también implica una carga económica, que deberá esforzarse por devolver a este bello espacio su estado original.