La pieza, dirigida por Jorgelina Teyseyre, se aleja de los formatos convencionales de teatro, explorando un proceso creativo rizomático que se nutre de diversas textualidades no dramáticas, como cuentos, poemas y escritura propia. La dramaturgia invita al espectador a cuestionarse sobre los fantasmas que habitan en nosotros y en nuestro entorno, el misterio que nos rodea y la necesidad constante de construir refugios, tanto físicos como emocionales.
El elenco, conformado por actores de renombre como Ana Celia Arru, Estefanía Bailey, Jorgelina Isabelle D'urbano, Vanesa Martínez, Paz Gutiérrez, Joaquín Heiland y María Julia Lupori, transmite la complejidad emocional y psicológica de esta travesía, que no solo es un ejercicio teatral, sino una reflexión profunda sobre la condición humana.
El diseño de iluminación y la parte técnica de La Isla de los Alucinados II están a cargo de Liz Martinelli y Renata Diullio, quienes crearon una atmósfera visual que potencia la tensión y la inmersión en la propuesta. El diseño y confección del vestuario, realizado por Estefanía Bailey y Marilyn Maidana, juega un papel fundamental en la caracterización de los personajes, alineándose con la estética fantástica y ominosa de la obra. Además, Marilyn Maidana también se encargó del diseño de maquillaje, aportando a la creación de los ambientes visuales de la pieza. La música, compuesta por Armando Damiano, contribuye a intensificar el clima inquietante, mientras que la ilustración y la gráfica de María Celeste Olivera dan forma a la identidad visual de la obra, complementando la experiencia sensorial del público.
La iluminación, el vestuario y la música se convierten en elementos esenciales para tejer esta experiencia colectiva, creando un "refugio provisorio" que conecta al público con lo más íntimo de sus emociones.
Tras un exitoso estreno que agotó todas las localidades, La Isla de los Alucinados II promete nuevamente cautivar con su propuesta única.