Fuertes vientos y lluvias en Necochea: continúa la alerta amarilla y naranja del SMN

El distrito de Necochea atraviesa este lunes una jornada marcada por condiciones meteorológicas adversas, según el reporte oficial del Servicio Meteorológico Nacional (SMN). Se mantienen activas las alertas amarilla y naranja por vientos intensos del sector sur, con ráfagas que podrían superar los 95 km/h en distintos sectores de la región.

Desde horas de la madrugada, se registran lluvias aisladas y un marcado descenso de temperatura. La mínima fue de 4°C, y se espera una máxima de apenas 9°C. Los vientos soplan con fuerza desde el sur, con velocidades que alcanzan los 50 km/h, y ráfagas que podrían intensificarse durante la tarde. La humedad supera el 90% y la presión atmosférica se mantiene baja, en 994.6 hPa, lo que refuerza el escenario de inestabilidad climática.

Detalle de las alertas

Alerta Naranja por Viento:
“El área será afectada por vientos del sector sur, con velocidades entre 60 y 70 km/h y ráfagas que pueden superar los 95 km/h”, indicó el SMN.

Recomendaciones:

• No refugiarse cerca de árboles ni postes eléctricos.

• Permanecer bajo techo y en lugares seguros.

• Tener preparada una mochila de emergencia con elementos básicos: linterna, radio, documentos y teléfono cargado.

• Ante emergencias, comunicarse con los organismos locales de protección civil.

Alerta Amarilla por Viento:
“Vientos del sur con velocidades entre 35 y 65 km/h, y ráfagas que pueden superar los 80 km/h”.

Sugerencias:

• Evitar actividades al aire libre.

• Asegurar objetos que puedan volarse.

• Mantenerse informado a través de medios oficiales.

Afectación en todo el distrito

Las alertas rigen para todo el ámbito del distrito, incluyendo Necochea, Quequén, La Dulce, Juan N. Fernández, Ramón Santamarina, Claraz y Energía. Las autoridades locales recomiendan limitar los desplazamientos y extremar precauciones en zonas costeras, caminos vecinales y espacios públicos con arbolado denso.

Desde Defensa Civil se recuerda la importancia de no subestimar este tipo de fenómenos, especialmente por el riesgo de caída de árboles, cortes eléctricos y daños estructurales.