La convocatoria, impulsada por familias autoconvocadas, organizaciones y prestadores de salud, pone el foco en una realidad alarmante: prestaciones interrumpidas o directamente sin autorizar, pagos congelados y con demoras de meses, terapias recortadas, transporte sin cubrir y profesionales que abandonan el sistema por salarios indignos.
Además, varios centros y entidades especializadas se encuentran en riesgo de cierre por falta de financiamiento, lo que agrava aún más la exclusión y la sobrecarga emocional y económica que enfrentan muchas familias.
✅ Aumentos automáticos por inflación para cubrir costos reales
✅ Refuerzo en las pensiones
✅ Pagos en tiempo y forma a prestadores
✅ Sustento financiero para instituciones
✅ Protección integral de los derechos de niños, niñas y adultos con discapacidad
Desde la organización remarcan que la asistencia es fundamental: “Es ahora o nunca. Por sus derechos, su salud y su dignidad. La discapacidad no puede esperar.”
Se invita a la comunidad a participar con carteles, banderas y remeras, haciendo visible un reclamo que atraviesa a miles de familias en todo el país.