“No me gustó. Entiendo el enojo. Yo soy productor agropecuario y obviamente no me gustó. Yo vendí todo lo que tenía que vender con mis hermanos, que trabajamos en el campo, con retenciones al 26%”, señaló Espert, oriundo de Pergamino, durante una entrevista con radio Mitre.
La medida, establecida por el Decreto 682/2025, fijó las retenciones a cero por ciento para granos y subproductos con el objetivo de reforzar las reservas del Banco Central. Sin embargo, la vigencia fue breve: solo tres días o hasta alcanzar un tope de ventas externas por US$ 7.000 millones, lo que generó enojo entre los productores.
A pesar de su crítica, Espert destacó un aspecto positivo: “El medio vaso lleno es que este es un gobierno que por primera vez en treinta años, porque el último que lo hizo de manera permanente fue Menem, reduce las retenciones agropecuarias. Hoy, hablando de la soja, un solo producto, nada más, hoy son siete puntos menores a las que teníamos cuando asumió el presidente Milei”.
El candidato libertario diferenció el enojo de los productores de la decisión estratégica del Gobierno: “Separemos el enojo que muchos productores tenemos por no haber podido vender la soja con cero retenciones con la decisión estratégica de un Gobierno que va a terminar con las retenciones porque creemos que no deberían existir”.
Cabe recordar que durante 2025, el Gobierno había implementado varias reducciones y ajustes:
Enero: retenciones temporales a la soja del 33% al 26%, y subproductos como harina y aceite del 31% al 24,5%. Maíz y sorgo del 12% al 9,5%, mientras que trigo y cebada se mantuvieron al 9,5%.
Agosto: la baja anunciada en enero quedó permanente a través del decreto 526/25.
La polémica surge en un contexto de campaña electoral para diputados nacionales, donde Espert se posiciona como figura clave de La Libertad Avanza, partido que ha centrado parte de su discurso en la defensa del sector agropecuario y la eliminación de retenciones.
Con sus declaraciones, Espert busca marcar distancia de los efectos inmediatos del decreto, al mismo tiempo que se posiciona como aliado del campo, reforzando su mensaje ante un electorado sensible a las políticas agropecuarias.