En la convocatoria compartieron este mensaje:
“Nos reunimos para honrar la memoria de Magalí y acompañar a su familia y amigos en este día tan difícil. Los invitamos a recordarla con amor y exigir justicia”.
El encuentro busca mantener visible el caso, ofrecer afecto a los familiares y reforzar la red de apoyo para quienes atraviesan situaciones similares.
La madrugada del 1° de diciembre de 2024 quedó marcada por la violencia extrema. Tras preparar una torta de dos pisos para un casamiento, Magalí asistió a la celebración junto a Cerfoglio. Horas después, una discusión derivó en golpes brutales en plena calle, que terminaron con el femicidio.
El agresor arrojó el auto Honda Fit de Magalí al Río Quequén, donde la joven murió ahogada. Las cámaras de seguridad registraron el vehículo circulando a alta velocidad y desviando hacia el río. La autopsia confirmó múltiples golpes compatibles con violencia de género y determinó que la causa de muerte fue asfixia por sumersión.
Hoy, el auto permanece en un depósito policial, y la familia declara:
"Es chatarra, no sirve para nada, no lo queremos" le expresaron al diario Clarín sus padres
Cerfoglio está detenido en el penal de Batán, pabellón evangélico, y enfrenta homicidio cuádruplemente calificado —por ensañamiento, violencia de género y femicidio—, tras la investigación de los fiscales Walter Pierrestegui y Marcos Bendersky.
Desde la cárcel, Cerfoglio intentó denunciar a sus exsuegros, alegando que lo “mandaron a matar”, en un intento de victimizarse, mientras su familia niega el femicidio y lo describe como un accidente.
Para los padres de Magalí, Felipe “Tito” Vera (75) y Stella Maris Castro (66), el aniversario se siente con dolor multiplicado. Hace siete meses y medio no pueden ver a su nieto de 13 años, quien vive con los abuelos paternos y mantiene el vínculo totalmente cortado. La última vez que lo vieron fue el 17 de abril, y desde entonces los mensajes han sido ignorados o bloqueados, mientras la familia paterna contesta:
“Hablá con mi abogada”.
“Vivimos el día a día”, repiten los padres, enfrentando un duelo imposible de reparar y la ausencia de su nieto.
Además, según expresó Clarín avanzan con una demanda civil contra Cerfoglio para evitar que venda bienes familiares, entre ellos la casa, una camioneta Fiat Toro y una moto recién adquirida por Magalí.
El homenaje busca mantener vivo el recuerdo de Magalí y sostener la exigencia de justicia frente a un femicidio que marcó a Necochea. Los organizadores destacan:
“Su luz siga guiándonos y que su presencia viva en cada gesto de lucha”.
En el Espacio de las Mariposas, inaugurado en junio con una placa, se recuerda a Magalí como madre, hija, hermana y pastelera, “dulce como los colibríes”. La convocatoria también tiene el objetivo de fortalecer la red de apoyo para personas que atraviesan situaciones similares y asegurar que el caso no pierda visibilidad frente a la Justicia.