

Bahillo remarcó que desde la Secretaría "estamos siguiendo la evolución del estado de los cultivos", y subrayó que "hoy la estimación que tenemos es que la cosecha de trigo será de 16,5 millones de toneladas". No obstante, indicó que este volumen permitirá abastecer tanto al mercado interno como a las exportaciones.
En una nota en Telam del periodista Juan Manuel COlombo se señala, sin embargo, que la campaña 2022/23 de trigo, que se encuentra en pleno desarrollo, se encamina a ser la peor en siete años, con estimaciones de producción tanto oficiales como privadas de 16,5 millones de toneladas, debido a la severa sequía que afecta el área agrícola nacional.
De concretarse esta proyección, la cosecha del cereal caería 5,5 millones de toneladas por debajo de las 22 millones de toneladas obtenidas el año pasado, según cifras oficiales, y esta caída podría ser peor ya que de no producirse lluvias importantes en el corto plazo, el deterioro de los cultivos podría agudizar su deterioro.
El funcionario nacional señaló la "preocupación por la ausencia de lluvias de estas últimas cuatro semanas, en un contexto donde hace casi tres años que venimos conviviendo con el fenómeno de La Niña" .
Según el último informe de la Mesa Nacional de Monitoreo de Sequías, liderada por la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, la superficie afectada por sequía en el país "superó las 140 millones de hectáreas".
En el trabajo, fechado el 1 de octubre último, señala que "las condiciones de déficit hídrico determina la elevación a categoría sequía severa en 53 departamentos del centro del país", y afecta a 12.400.000 cabezas de ganado y a 1,8 millones de hectáreas de trigo.
En este sentido, Bahillo destacó que desde la Secretaría que dirige están trabajando junto al sector "para mitigar el posible impacto de la sequía".
"Entendemos que hay que administrar esta situación y creemos que podemos cumplir los compromisos asumidos", dijo el funcionario al adelantar que la semana próxima contarán con un informe técnico, trabajado en conjunto con el área de meteorología del INTA, que detallará tanto el impacto de la situación como también una proyección de la evolución del clima para los próximos meses.
Además, el jueves último Bahillo comunicó a los diferentes eslabones de la cadena triguera que, a partir de la publicación del informe, también se contarán "los planes y pasos a seguir para acompañar a mitigar y disminuir cualquier problemática que la sequía pudiera llegar a generar".
Junto con la falta de lluvias, otro fenómeno climático que empeoró de manera contundente el estado del trigo fueron las heladas tardías que se produjeron sobre el centro y sur del área agrícola en los últimos días.
Esto aceleró el recorte de un millón de toneladas de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) hasta las 16,5 millones de toneladas, aunque dejó abierta la puerta para que las mermas productivas continúen en los próximos días de no producirse lluvias y de registrarse nuevas heladas.