La Cámara Federal de Apelaciones de Bahía Blanca confirmó esta semana el procesamiento de Analía Gladys Consoli por tener vinculación con al menos tres atentados que se produjeron en esa ciudad durante 2021 y 2022.

Se acusa de ser instigadora de incendio, partícipe secundaria de intimidación pública y falsificación de documento público (certificado de vacunación como emitido por el Ministerio de Salud de la Provincia).
También, de ser coautora de una asociación ilícita destinada a combatir ideologías e "imponiendo sus ideas por la fuerza y el temor, representando un grave peligro institucional contra el orden democrático" a través de mensajes "intimidatorios y amenazantes".

Jubilada, de 65 años, fue empleada bancaria y tenía una vida muy activa en redes sociales con consignas en contra el actual gobierno nacional y centenares de fotos de Alain Delón.

"Soy parte del 41% ESTO RECIEN EMPIEZA", dice su presentación en Twitter, donde compartía contenidos antivacunas.

Consoli además está registrada en AFIP en el rubro Imprenta, y durante un allanamiento en su casa de calle D'orbigny 4640 se encontraron panfletos en contra el pase sanitario y con frases de la médica Chinda Brandolino.

"Somos pueblo soberano, ellos no existen sin nosotros. Por consiguiente, tenemos que hacer valer nuestros derechos y si es necesario vamos a pegar el preámbulo de la Constitución Argentina en la luneta del auto para que lo tengan presente y se lo vamos a pegar en la puerta de las casas de ellos. Y otra de las cosas que podemos hacer es un escrache en la puerta de la casa al jefe de Región Sanitaria que es el que está apurando a la gente y apretando a la gente”, dijo en un audio en esa oportunidad.

Su hijo, Federico Pereyra Consoli, es agente de la policía bonaerense y también fue acusado por falsificación de documento público en calidad de autor por hacer certificados de vacunación con código QR, como emitidos por el Ministerio de Salud de la Nación.

En el expediente judicial se detalla un chat entre madre e hijo en el que ella le avisa que había dado con un médico que hacía certificados contraindicando la vacunación y le preguntó si quería que le pasara su nombre y le indicara que patología se podía acusar.

Y este respondió: “Igual quédate tranquila porque yo ya tengo unos pases truchos, los voy a truchar, le voy a hacer para Rocío, me voy a hacer para mí y si querés te hago para vos, cosa de imprimirlos, llevarlos”.

Incluso, en Facebook reivindicó la figura de Mohamed Alí Seineldín, nombre al que un grupo de desconocidos llamó a un supuesto Comando de Restauración Nacional que atentó contra una referente de la comunidad mapuche de Bahía Blanca y sindicalistas, aunque no se la pudo vincular con esas amenazas.
Sí, en cambio, quedó probada su arenga para hacer una acción contra el director de Región Sanitaria 1, Maximiliano Núñez Fariña, que se ejecutó el 8 de enero del 2022 prendiéndole fuego el portón de su casa.