Por: Noticias de Necochea

La oscura nube de misterio se cierne nuevamente sobre el buque "Nuevo Viento", mientras familiares desesperados luchan por respuestas y justicia ante la desaparición de Pepe Ferreryra. En un giro escalofriante, este no es el primer caso de su tipo, ya que tanto en el 2011, 2020, como en el 2023, personas han desaparecido bajo circunstancias inexplicables con el mismo capitán al mando. Estas desapariciones en medio del océano, sin testigos y sin rastro, han dejado a las familias sumidas en el dolor y la frustración, mientras la investigación parece no dar resultados. Ayer en el programa de Mariana Fabbiani familiares del necochense Ferreyra expusieron su angustia junto a la viuda de otro trabajador desaparecido. 

La voz de la tragedia resonó en la pantalla nacional cuando Mercedes Sanhueza, viuda de uno de los marineros desaparecidos del "Nuevo Viento", compartió su angustiosa historia en el programa DDM de América TV. La entrevista, llevada a cabo en exteriores, transmitió una sensación de solemnidad mientras Mercedes narraba los eventos que condujeron a la desaparición de su ser querido.

En el mismo estudio, Simón Ferreyra, hermano de Gabriel Ferreyra, el necochense marinero desaparecido en circunstancias similares del mismo barco, compartió su perspectiva. El relato de Simón arrojó luz sobre las difíciles condiciones laborales a bordo y planteó inquietantes cuestionamientos sobre la actuación de la justicia. Según sus palabras, después de que el propietario de la empresa sugiriera a la familia que no viajara a buscar a Gabriel, este nunca más fue visto.

Una sombra de duda se cierne sobre el accionar judicial en estos casos. Simón Ferreyra enfatizó que el juez a cargo del caso tomó declaraciones de algunos miembros de la tripulación, pero nunca interrogó al capitán del buque. Además, señaló la existencia de grabaciones de audio donde su hermano alertaba sobre las condiciones peligrosas del barco, pruebas que él mismo compartió con el juez.

El capitán del "Nuevo Viento" ha sido testigo de tres desapariciones en circunstancias misteriosas. Pepe Ferreryra se une a la lista junto a otro desaparecido del 2020 y otro caso en el 2011.

La trágica repetición de estas desapariciones plantea serias preguntas sobre la seguridad y la responsabilidad en el mar. Las familias de las víctimas claman por justicia, mientras el manto de incertidumbre sobre lo que realmente ocurrió en estas embarcaciones persiste, dejando un sombrío recordatorio de que el océano puede guardar secretos oscuros y perturbadores.