

La bonificación de "zona fría" se financia a través de un fondo fiduciario, alimentado por un adicional que pagan todos quienes reciben la factura y viven en zonas donde la calefacción es necesaria durante muchas horas del día y la noche debido a las bajas temperaturas. Su eliminación podría resultar en un incremento del 40 al 50 por ciento en las facturas de gas, según estimaciones.
El artículo 318 inciso “m” de la iniciativa enviada al Congreso establece la posibilidad de "modificar, transformar y/o eliminar los fondos fiduciarios del sector energético, inclusive los destinados a subsidios". Esta medida afectaría a más de 1.2 millones de usuarios en la provincia de Buenos Aires.
Aunque aún no se conocen los montos exactos, se proyecta que una familia tipo podría pagar facturas de hasta $80,000 en los primeros meses del invierno si se suma la quita de subsidios al aumento de la tarifa. Si se avanza con la eliminación de la bonificación por "zona fría", estas familias podrían enfrentar costos entre $100,000 y $120,000.
La senadora provincial Liliana Schwindt expresó su preocupación, destacando que "sería terrible" y que la medida va en contra del principio de solidaridad. El descuento por "zona fría" beneficia a hogares y personas que viven en áreas con temperaturas más bajas que el promedio, obligándolos a un mayor consumo de gas.
Los descuentos por "zona fría" en la provincia de Buenos Aires alcanzan a más de 1.2 millones de usuarios, y el mayor porcentaje de rebajas, alrededor del 50%, lo reciben jubilados, pensionados y trabajadores de menores ingresos. La medida impactaría especialmente en municipios del sudeste bonaerense.
La eliminación de este beneficio, sumada a otros aumentos, podría generar un importante impacto en la economía de los usuarios, quienes verían incrementadas considerablemente sus facturas de gas.