El intendente de Necochea, Arturo Rojas, desató un torbellino de reacciones tras su presencia en el Gran Premio de Fórmula 1 en Interlagos, Brasil, donde apoyó al piloto Franco Colapinto. Mientras algunos lo aplaudieron por disfrutar de un tiempo familiar, otros expresaron su descontento, cuestionando la oportunidad del viaje en un contexto donde el distrito enfrenta diversas dificultades. 

Rojas publicó en sus redes sociales una foto con su hija, Maitena, acompañada del mensaje: "Sueño cumplido. Fin de semana con mi hija viendo la Fórmula 1. Amor eterno y felicidad total".

 

 

 

 

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Sin embargo, esta muestra de felicidad no aplacó las críticas. Muchos vecinos se preguntaron si su tiempo podría haberse dedicado mejor a gestionar las necesidades de la ciudad, cuestionando si "no tenía nada más urgente que hacer por Necochea" y si "el aumento de las tasas municipales era para financiar su entrada VIP".

A pesar de esto, también hubo un fuerte respaldo hacia el intendente. Los comentarios en redes sociales reflejaron una variedad de opiniones, con algunos afirmando que "tiene derecho a disfrutar lo que quiera" y que "es un ser humano que también necesita desconectarse". Otros señalaron que, aunque tiene un salario elevado, su tiempo con la familia debería ser valorado, destacando que "pareciera que es más la envidia que la inoperancia".

Además, se notó que Rojas no fue el único necochense en asistir al evento. Un grupo de necochenses vinculado al rubro inmobiliario, automotor y de la construcción también disfrutaron de la carrera, lo que sugiere que el amor por el automovilismo es un vínculo compartido por muchos en la comunidad.

Así, el intendente regresará a Necochea en medio de una mezcla de apoyos y críticas, reflejando la complejidad de su labor en un contexto donde los desafíos de gestión son constantes.