

Dada la notoria aparición y el crecimiento poblacional de ejemplares de Ballena Franca Austral (Eubalaena Australis) y otros cetáceos en proximidades a las zonas balnearias, la Prefectura busca minimizar situaciones de riesgo. Históricamente, entre mayo y diciembre de cada año, esta zona es un área de tránsito crucial para estas especies migratorias, consideradas Monumento Natural en Argentina y en peligro de extinción a nivel internacional.
El fin de semana pasado, un incidente en la desembocadura del Río Quequén al mar, en la zona portuaria y vía navegable controlada por Prefectura, generó repercusiones en redes sociales. Droneros captaron el momento en que un carguero, al salir, pasó por encima de dos ejemplares de ballenas. Aunque no causó daños visibles, la operatoria del buque no se frenó ya que Prefectura no estaba al tanto de la presencia de los cetáceos. Cabe destacar que, una vez que un barco es remolcado en esa zona, no se puede frenar ni cambiar el rumbo sin riesgo de que encalle. Ante esta situación específica, Prefectura reitera la vital importancia de seguir el protocolo establecido.
La Prefectura ha establecido una serie de pautas obligatorias para todas las embarcaciones náutico-deportivas y comerciales que naveguen en el área:
Aviso Urgente: Ante cualquier avistaje de cetáceos, se debe informar de inmediato a la Estación Marítima de Quequén. Esto puede hacerse a través de la Estación Costera Quequén “L5B” Prefectura Naval Radio (vía canales VHF del Servicio Móvil Marítimo) o llamando al número telefónico 106 “Emergencias Náuticas” (o al 2262-450514 para la Guardia de Prefectura en Quequén). Es vital informar la posición y el rumbo del cetáceo. La misma acción debe tomarse si se constatan especímenes varados o con lesiones.
Distancias de Seguridad: Se han establecido zonas de navegación y distancias recomendadas:
Reducción de Velocidad y Maniobra: En caso de avistaje, se debe disminuir la velocidad a menos de cinco (05) nudos o al mínimo compatible con la maniobrabilidad. Se debe mantener una distancia prudencial mínima de al menos doscientos (200) metros. Es fundamental adoptar precauciones de vigilancia sin detener la marcha para evitar colisiones.
Evitar Acercamientos Peligrosos: Si un espécimen se detecta a una distancia menor a la indicada, se debe esperar, no acercarse por la cola ni por la cabeza, y no cruzar por la cabeza. Si es imprescindible alterar el rumbo, se debe disminuir la velocidad a menos de cinco (05) nudos y cruzar el rumbo de la ballena por la cola.
Reporte de Incidentes: Es obligatorio informar de inmediato a la Prefectura (vía VHF o al 106/2262-450514) en caso de colisionar con cetáceos o ser testigo de dicha situación.
La normativa también amplía las restricciones para todas las actividades acuáticas que se desarrollen cerca de las playas, ya sean deportivas o comerciales. Esto incluye kitesurf, windsurf, kayakismo, remo, pesca deportiva embarcada, stand up paddle, vela ligera, entre otras.
Asimismo, se prohíbe tajantemente el acercamiento y/o aproximación a cetáceos de cualquier tipo durante el desarrollo de actividades de buceo, tanto deportivas como comerciales. El objetivo es prevenir accidentes y lesiones tanto a las personas como a estos valiosos mamíferos marinos.
La Prefectura Naval Argentina reitera la importancia de cumplir con estas directrices para garantizar la seguridad de la navegación y, primordialmente, contribuir a la conservación de la Ballena Franca Austral y otros cetáceos en nuestras costas.