

Acompañado por Luis Caputo, ministro de Economía; José Luis Espert, presidente de la Comisión de Presupuesto; y Manuel Adorni, vocero presidencial, Milei explicó los principales puntos de la ley de leyes que regirá las cuentas públicas el próximo año.
El Ejecutivo destacó que el 85% del gasto nacional proyectado para 2026 se destinará a educación, salud y jubilaciones. Entre las principales partidas:
+17% en términos reales en el área de salud.
+8% por encima de la inflación en educación.
+5% real en jubilaciones y pensiones por discapacidad.
$4,8 billones para universidades nacionales.
El proyecto incorpora una “regla de estabilidad fiscal”, que obliga a ajustar partidas automáticamente en caso de caída de ingresos para asegurar equilibrio o superávit.
Asimismo, se establece que el Tesoro no podrá recurrir al Banco Central para financiarse, evitando la emisión monetaria y reduciendo riesgos inflacionarios.
La iniciativa insiste en la “presunción de inocencia fiscal”, presentada previamente en el Congreso, que busca otorgar seguridad jurídica a quienes poseen dólares no declarados y modificar parámetros de evasión.
En paralelo, se incorpora el régimen de extinción de deudas cruzadas entre Nación y provincias. Según datos oficiales, 18 jurisdicciones ya adhirieron a este mecanismo, que permitió cancelar obligaciones por casi $400 mil millones.
El Presupuesto contempla:
Crecimiento del PBI: +4,5%.
Inflación anual: entre 7% y 12%.
Superávit primario: 2,2% del PBI.
Equilibrio financiero: tras el pago de intereses de la deuda.
Recaudación tributaria: +22,3% nominal frente a 2025.
Gasto en asistencia social: 3,2% del PBI.
Milei reconoció que “los primeros años fueron los más duros”, pero afirmó que los cimientos ya están colocados: la baja de la inflación, la reducción de impuestos, la salida del cepo y la disminución de la pobreza fueron presentados como avances iniciales.
“El rumbo está fijado en piedra y el equilibrio fiscal no se negocia. Todos los demás caminos se intentaron y fracasaron”, remarcó. Y agradeció a los argentinos por lo que definió como un “temple heroico”.
“El equilibrio fiscal es la solución final a los problemas que azotan a la Argentina. El futuro depende de que el pueblo y la política se comprometan con el orden fiscal”.
“El equilibrio fiscal es un principio no negociable, ningún país del mundo puede funcionar correctamente sin un presupuesto equilibrado”.
“Esta solución tiene plazos de desarrollo largos. Los éxitos que tuvo nuestro plan son parecidos a los cimientos en la construcción de un edificio”.
“Celebramos la baja de la inflación, la baja de la pobreza y la salida del cepo como grandes logros. Muchos aún no lo perciben en su realidad, pero entendemos su situación”.
“Lo peor ya pasó. El temple de los argentinos es heroico y por eso les quiero dar las gracias”.
“Somos el único país que pasó de ser desarrollado a subdesarrollado. El problema no era el cocinero, sino la receta”.
“Este presupuesto le asigna $4,8 billones a las universidades, aumenta jubilaciones un 5%, salud un 17% y educación un 8% real. La prioridad de este gobierno es el capital humano”.
“Ningún argentino vivo experimentó jamás la Argentina que estamos construyendo. El esfuerzo vale la pena”.
“Este presupuesto está planteado con superávit primario. Presenta el menor nivel de gasto en relación con el PBI de los últimos 30 años”.
“Todos hemos hecho enormes esfuerzos. Los sueldos del Poder Ejecutivo están congelados desde el inicio de la gestión. El rumbo es arduo, pero es el correcto”.