La mayor sorpresa se registró en la Provincia de Buenos Aires, donde Diego Santilli logró una histórica remontada, superando al peronismo por casi 10 puntos y convirtiéndose en la figura clave que permitió el resultado nacional de los libertarios. Este triunfo revierte parcialmente la derrota sufrida en las elecciones locales de hace menos de dos meses.
En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), la dirigente Patricia Bullrich logró un contundente triunfo, con 20 puntos de ventaja sobre la principal fuerza opositora, consolidando el bloque aliado que refuerza el respaldo nacional de LLA.
En la Cámara de Diputados, La Libertad Avanza sumó 64 nuevos diputados, que se suman a los 29 que ya tenían mandato vigente, más aliados como 13 diputados del PRO. Con este resultado, el oficialismo supera el tercio necesario para blindar vetos y se acerca al quórum requerido para avanzar con reformas estructurales.
En el Senado, LLA logró 13 nuevas bancas y ganó en 6 de las 8 provincias donde se elegían senadores: Salta, Chaco, Entre Ríos, CABA, Neuquén y Tierra del Fuego. Sumado al segundo lugar en Río Negro, esto eleva la bancada propia a 19 senadores, con al menos 6 aliados, consolidando una posición sólida en la Cámara Alta. El peronismo apenas retuvo 9 de las 15 bancas que ponía en juego y quedará con 28 escaños, lejos del quórum.
El triunfo nacional de LLA representa un respaldo político decisivo para Milei, tras semanas de incertidumbre financiera y escándalos que habían marcado la campaña. Desde el búnker libertario, el presidente celebró la jornada electoral y destacó la Boleta Única de Papel como garantía de transparencia: “Dijimos que lo íbamos a hacer y lo hicimos, por un sistema democrático transparente”.
Entre los factores que explican la victoria, se destacan la estrategia de reemplazo de candidatos en Buenos Aires, la territorialidad reforzada por el propio Milei y la consolidación de su gabinete económico liderado por Luis “Toto” Caputo, clave en la estabilidad financiera durante la campaña.
El mapa político nacional quedó reconfigurado: el oficialismo ganó en 16 provincias, mientras que el peronismo solo retuvo Santa Cruz, La Pampa, San Juan, Tucumán, Catamarca y Formosa. Provincias Unidas quedó al borde de la extinción como proyecto nacional, con Corrientes como único distrito ganado.
Con estos resultados, Milei inicia la segunda etapa de su mandato con mayor respaldo legislativo, con capacidad de avanzar en reformas estructurales y blindar sus decisiones frente a eventuales vetos, mientras el peronismo enfrenta un escenario de dispersión y necesidad de reconstruir su influencia en el Congreso.