El amanecer ayer martes  sobre la Ruta 2 expuso una escena de extrema gravedad: un micro volcado sobre el cantero central, chapas retorcidas, valijas desparramadas y pasajeros en estado de shock. El vehículo, que había partido del oeste del conurbano con destino a Mar del Plata, terminó de costado a la altura del kilómetro 325, dejando como saldo dos personas fallecidas y más de 40 heridos.

El chofer, que debió ser rescatado por bomberos tras quedar atrapado entre los pedales, fue aprehendido e imputado por homicidio culposo y lesiones culposas. Permanece internado en el Hospital de General Pirán, fuera de peligro pero bajo custodia policial, esperando el alta para ser trasladado a la Fiscalía de Delitos Culposos de Mar del Plata.

La investigación está a cargo del fiscal Germán Vera Tapia, quien confirmó que el conductor dio negativo en el test de alcoholemia. No obstante, la Justicia espera los resultados del análisis toxicológico para determinar si había consumido alguna sustancia. Por ahora, la hipótesis con más fuerza apunta a una conducción imprudente, una maniobra que habría provocado el desvío del micro —que trasladaba a 56 pasajeros— y su posterior vuelco.

Las víctimas y la asistencia

Las dos víctimas fatales murieron en el acto. Más de 40 personas resultaron heridas, algunas con traumatismos graves y riesgo de vida. El operativo de emergencia movilizó ambulancias de General Pirán, Coronel Vidal y zonas cercanas, que derivaron a los pasajeros a distintos centros de salud.

La unidad pertenecía a la empresa Turismo New Bus y trasladaba a vecinos de Moreno, Morón y Ciudadela rumbo al 1° Encuentro Internacional de Hábitat, que iba a desarrollarse en el Gran Hotel Provincial. El evento, que incluía un acto de cierre encabezado por el gobernador Axel Kicillof, fue suspendido tras conocerse la tragedia.

Mientras avanzan las pericias y la declaración del conductor, la Ruta 2 vuelve a quedar asociada a un episodio fatal, transformando un viaje habitual en un momento de impacto y dolor.