El servicio de transporte público de pasajeros en Necochea y Quequén quedará totalmente paralizado desde las 00 horas de este martes 16 de diciembre, tras una medida de retención de tareas dispuesta por la Unión Tranviarios Automotor (UTA) debido al incumplimiento en el pago de salarios.

Según confirmaron fuentes gremiales, las empresas concesionarias adeudan el 40% de los haberes correspondientes al mes de noviembre, situación que afecta directamente a los choferes y a sus familias. Ante la falta de respuestas, el sindicato resolvió avanzar con la medida de fuerza.

El paro vuelve a exponer falencias históricas del transporte público local. Las empresas Nueva Pompeya y Transporte Necochea registran antecedentes de pagos fuera de término, falta de renovación de unidades, problemas de accesibilidad y un servicio que no mejora en frecuencia ni cobertura. Aun con subsidios nacionales antes y provinciales ahora, la situación se repite, mientras el contrato de concesión vence este verano sin definiciones sobre el futuro del sistema.

Desde la UTA indicaron que se aguardó hasta este lunes 15 la cancelación total de los sueldos, pero al no registrarse novedades, se resolvió el inicio de la retención de tareas. La medida será por tiempo indeterminado, hasta tanto se abone la totalidad de los salarios adeudados.

El conflicto genera un fuerte impacto en miles de usuarios que utilizan diariamente el transporte público para trasladarse por razones laborales, educativas y de salud en ambas ciudades.

Por el momento, no se informó una instancia de negociación ni una fecha estimada para la normalización del servicio.