jueves 28 de marzo de 2024 - Edición Nº2734

Arte y Cultura | 25 feb 2019

El Festival Isoca recibió a mil personas que disfrutaron del arte y la autogestión

Mil personas pasaron por el predio donde hubo más de treinta bandas y talleres. Para los organizadores, artistas y público todo transcurrió en paz y alegría; hasta las inclemencias del tiempo convivieron con la cultura y el arte de la naturaleza.


Finalmente llegó el día y el Festival Isoca sucedió de la mejor manera posible: dos días de música, arte y convivencia pacífica donde alrededor de mil personas pasaron por el predio en la rivera del río y disfrutaron, compartieron y vivieron una fiesta con la armonía de la naturaleza.

Durante el mediodía del viernes la gente comenzó a llegar desde la terminal a pie o en sus autos generando una importante fila donde reinaba un clima de buen humor y de expectativa por lo que los esperaba dentro. Finalmente los y las jóvenes y las familias comenzaron a ingresar y a instalar sus carpas bajo la fila de eucalptos; a la tardecita ya había un barrio de cien, canadienses, iglú y de todo tipo.

Luego llegó el momento de la acción: los talleres en cuatro espacios diferentes de la chacra, y los recitales en dos escenarios, uno al aire libre y otro en una carpa. A pesar de algunas lluvias intermintentes que suspendían el primero de ellos durante algunas horas hasta que el sol permitía retomar, todo fluyó con normalidad para alegría de los organizadores, los artistas y el público.

Los organizadores del primer Festival Isoca fueron una gran cantidad de personas, pero escencialmente la idea fue llevada por los músicos que conforman El Plan de la Mariposa, el grupo local que lleva unos siete años recorriendo el país con su música, teniendo un importante público y una relación con el mismo muy particular.

El violinista, y uno de los cinco hermanos que conforman la banda, Santiago Andersen, habló con NdeN e intentó resumir las sensaciones una vez finalizado el Festival: "La verdad es que estamos re contentos, fueron unos días muy especiales para los cuales se preparó muchísimo y todo salió de la mejor manera", comenzó y agregó: "se dio una sensación generalizada de armonía y de buena predisposición de todas las partes, de la gente que vino a participar de los talleres, a escuchar la música y a pasar un buen momento".

En el predio, ademas de los emprendimientos regionales y la prensa, no había empresas privadas ni banderas partidarias. Solamente el puesto sanitario, la ambulancia, y estaba presente un stand de la Asociación Alfredo Marcenac, quienes pugnan por la “promoción de acciones colectivas tendientes a la construcción de una cultura pacífica y segura". Y también un "puesto violeta", un stand municipal de "acompañamiento y estrategias de cuidado", un espacio para prevenir situaciones de violencia de género en los ámbitos que hacen a la nocturnidad, quienes disfrutaron de no tener que intervenir.

Respecto a quienes formaron parte de toda la organización, la lógistica, el expendio, estacionamiento, etc, Santiago se refirió: "estamos muy contentos y satisfechos por haberlo armado y que haya salido de esta manera, somos un equipo grande de laburo y todo se dio de una forma muy disfrutable y fue un gran momento para todos", reconoció. Quienes recorrieron el predio habrán recalado en que, además de los puestos mencionados, también los de agua potable, duchas frías, la caja, y el escenario principal estaban armados con pallets, troncos de eucaliptos y alambre. Fue un trabajo de 1 mes donde un grupo de personas se mudó en carpas al lugar.

Finalmente, el compositor también se refirió a la actitud del público que convivió en esas dos noches inolvidables para la cultura de nuestra ciudad: "en especial quiero resaltar todo el comportamiento, la onda de toda la gente, ni hubo que juntar basura, no hubo ni un conflicto entre nadie, fue todo muy fluido, todos predispuestos para disfrutar y para compartir, así que la verdad que estamos muy contentos con cómo se dio todo este sueño que tuvimos y que pronto fue realidad"

"Vino muchísima gente de un montón de lugares, de otras ciudades y otros países, que andaban por acá, y de pronto se dio un ambiente muy diverso y muchas propuestas diferentes, los talleres al palo también de capacidad y todos los talleristas pudieron compartir lo que saben hacer, tambien hubo arte en vivo", expresó Santiago.

 

 

 

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