

Las playas de Chapadmalal, partido de Mar del Plata, se encuentran en el foco de un potencial suceso internacional, ya que investigadores argentinos y de los Estados Unidos se encuentran intentando develar si en dicha zona cayó un meteorito hace tres millones de años.
El trabajo es impulsado por geólogos del Conicet y de dos universidades norteamericanas en Estafeta, sobre la ruta 11. La NASA financia la investigación, que consiste en conseguir muestras de sedimentos a la mayor profundidad posible. El material que se consiga será enviado a los Estados Unidos para su análisis.
Según indicaron desde el proyecto, la idea es llegar hasta los 80 metros de profundidad. A partir de allí, la excavación la llevan a cabo unas doce personas, coordinadas por Marcelo Zárate, del Conicet. El trabajo consiste en introducir un cilindro de siete centímetros de diámetro, a través de cual se busca conseguir sedimento.
El diario nacional “Página 12”, aseguró que con las muestras que se obtengan tratarán de tener idea sobre el ambiente y el clima en el pasado. Para los investigadores, se podrían obtener datos certeros de hasta ocho millones de años de antigüedad.
“A mediados de los 90, la teoría del meteorito en lo que tres millones de años más tarde sería Mar del Plata, se difundió en una nota de la revista Science. La teoría se basó en el análisis geológico de la tierra en Playa Chapadmalal. El impacto del meteorito habría causado la extinción de la flora y fauna. El estudio actual apunta a saber si el meteorito existió o si fue un evento menor”, afirmaron desde el matutino.
El gliptodonte es una de las especies que podría haber sucumbido tras el impacto del meteorito. La presencia de deshecho minerales en la tierra marplatense fue un indicio para los científicos que postularon la hipótesis hace dos décadas. Una gran fuente de calor tiene que haber sido la que fundió los materiales del suelo, de allí que se sospeche que el cráter pudo haber sido en la zona.
Para los científicos, un asteroide mucho mayor fue el que acabó con los dinosaurios hace 65 millones de años. El impacto se calcula que fue en la península de Yucatán, en México.