La disgregación del peronismo necochense es un proceso que ni siquiera pudo sortear las elecciones de 2019. Más allá de haberse cerrado una lista única detrás de la candidatura de Facundo López, lo cierto es que el acuerdo tenía un carácter más nacional que local, lo cual dejó varios heridos que en lo concreto definieron no militar la elección y llamarse al silencio.

El poder ordena, y este pareciera ser el factor determinante para que dicho escenario se modifique en la actualidad. ¿En qué sentido? Las responsabilidades de gobierno que se generaron tras el triunfo Fernández-Fernández, y más aún la pandemia, generó aún mayor necesidad en lo que hace a la unidad de la coalición que gobierna el país y la provincia.

A su vez, la decisión del intendente Arturo Rojas de romper con “Juntos por el Cambio”, no alinearse al frente “Todos” y construir un camino “vecinalista”, imposibilita la construcción de un escenario polarizado como se avizora a nivel general, lo cual genera al peronismo local una nueva demanda de unidad que le permita pelear los primeros dos lugares del podio que lo ubiquen como propuesta de poder de cara al 2023. Esta situación no pasó desapercibida para el gobierno provincial.

La visita en febrero del gobernador Axel Kicillof y el jefe de Gabinete, Carlos Bianco, así como la reunión en La Plata que este último mantuvo con los principales referentes del peronismo necochense fueron los principales movimientos de piezas generados por la Provincia con el objetivo de que el rompecabezas cierre.

¿En casa cómo andamos?

Un aspecto central para que el tablero cierre con todas las piezas adentro es justamente la cantidad de piezas que tiene el juego. La multiplicidad de organizaciones locales genera problemas por la cantidad de interlocuciones que deben mediarse para lograr acuerdos que permitan avanzar unos pasos.

“Hay que incluir en un armado a 4 o 5 armados y no va a poder poner concejales todos”, aseguró a este medio un dirigente proveniente de la CGT. “Son 15 o 20 sellos en toda la ciudad. Cada uno juega la propia y eso genera mucha inorganicidad para unir todo”, aseguró a NdeN otra de las referencias que integra la mesa chica del armado.

¿Cuál es la mesa chica? Sin dudas que los espacios más representativos y con más fuerza quedan reflejados en la foto de la reunión convocada por Bianco y gestionada por la diputada nacional, Jimena López.  

El Frente Renovador, La Cámpora, la CGT, el Movimiento Evita y el Partido Justicialista parecieran ser la mesa que tendrá la tarea de cerrar un acuerdo que no deje a nadie afuera. A este grupo se le sumó la diputada provincial Natalia Sánchez Jauregui, quien intenta recomponer la iniciativa del partido Fe en la ciudad tras el corrimiento de Rojas y compañía.

Más allá de las políticas que puedan consensuar para los próximos meses, lo cierto es que el cuello de botella a sortear serán las candidaturas de la próxima boleta. El cálculo que se hace hacia el interior del espacio es simple y la resolución compleja; hay diez lugares y con una buena elección a lo sumo se lograrán dos o tres bancadas para el Concejo Deliberante.

Este problema es visto por todos y todas en el espacio, lo cual ya generó disputas internas, las cuales, de todas formas y por ahora, vienen condensándose internamente.

 “Mujeres por la lapicera”

Tras cruces y distanciamiento durante el mandato de Facundo López, el Frente Renovador y La Cámpora volvieron a acercar posiciones, y al momento son las dos fuerzas con más peso en el armado de las listas, ya sea por referencia provincial como por construcción electoral a nivel local.

“Mujeres por la lapicera”, suele ser la expresión utilizada por una importante referencia del espacio para hacer alusión a la alianza que tendría el frente “Todos” a nivel local. Jimena López (FR) y la concejal Andrea Cáceres (La Cámpora) son quienes encabezan públicamente esta perspectiva que tendrá gran responsabilidad en el armado de la pieza. “Han logrado un gran equipo y eso incomoda”, agregan dirigentes del armado que no dejan pasar los “resquemores” que esta alianza generaría en “los machirulos que hay en el movimiento”.

Jimena López junto a Máximo Kirchner y Andrea Cáceres tras el acto por la ley que declarará a Necochea "zona fría". 

Ahora bien, y más allá de los sectores con más peso político, lo cierto es que el equilibrio del espacio quedará determinado por los lugares que se les abran al resto de las organizaciones con peso. Allí el río parece más revuelto.

A priori parece vislumbrarse tensiones entre los movimientos sociales, las representaciones de la CGT y el PJ por lograr un lugar expectante. En el caso de las organizaciones territoriales, es el Movimiento Evita el que ostenta la referencia del sector. “Vamos a pelear porque un compañero o compañera este sentada en el Concejo Deliberante representando a este sector. Hoy no hay una voz que represente a los movimientos sociales en el Concejo”, aseguran desde los movimientos sociales locales. 

La ecuación que hacen desde el Evita es sencilla; en la actualidad el Concejo Deliberante tiene representaciones de la CGT (Rafael Iacono) y del PJ (Norma Alí), por lo que el lugar que debe garantizarse es el de las barriadas. Más allá que la referencia se concentre en la organización que conduce Luciano Lescano, lo cierto es que a partir de la UTEP, el espacio a logrado congregar tras de sí el apoyo de gran parte de las organizaciones territoriales peronistas. 

En la vereda opuesta, no conforman los argumentos esbozados: “En construcción protosindical de la UTEP, el liderazgo es marcado por el Evita. Estos compañeros creen que pueden traducir esa construcción territorial en el armado de las listas. No creo que se traduzcan linealmente porque nuestras sociedades son refractarias a estas construcciones”.

Otro de los sectores que empezó a tomar mayor relevancia, tiene que ver con la expresión política que se empezó a construir desde la CGT. Allí confluyen el titular de la confederación, Demian Ledesma, el concejal Iacono y la extitular de la OMIC, Silvia Jensen. Allí también intentarán tener su candidatura propia en la boleta de las próximas legislativas.   

En el caso del PJ, su poder de negociación a mermado en el último tiempo, ya que la conducción del armado se ha ido diluyendo al poco tiempo de que Marcelo “chelo” Rivero asumiera al frente del partido. Las diferencias con el transportista Miguel Aguilar, con importante peso en la base de afiliados, hizo perder consistencia a la organización que de todas formas es del inicio en las negociaciones.

Por fuera de estos espacios, también intentan hacer pie las expresiones políticas de la CTA de los Trabajadores, el "Frente de Todos Unidad" con el casinero Hansen,  el “Proyecto Necochea” de José Luis Vidal, “Lealtad” del concejal Ignacio Barrena y otras organizaciones más que intentará posicionarse a la interna buscando lugares expectantes en las próximas elecciones.

Los próximos meses serán trascendentales para el peronismo local, ya que serán la antesala de las negociaciones finales previo al cierre de las listas. Habrá que ver qué decisiones se tomarán en post de definir las principales candidaturas al Concejo Deliberante, evitando dejar “heridos” y logrando la mayor cantidad de adhesiones que permitan armar el “rompecabezas” sin que falte ninguna pieza.