No es novedad que en la temporada estival cuando sube la temperatura comienza hacerse permanente la falta de agua, sumado a turistas que llegan a la ciudad, se incrementa el consumo y seguramente se derroche bastante en algunos hogares.

Algunos barrios de la ciudad de Necochea viven la problemática con más reincidencia y otros sufren intermitencia en el servicio más la situación de cortes de servicio eléctrico, en muchos casos por motivos de inseguridad y en otros por falta de inversión, que detienen el trabajo en los pozos de los distritos. 

Y como si esto fuese poco para quienes gobiernan y son gestión, aún falta nombrar la sequía que afecta a gran parte de la Provincia de Buenos Aires y nuestra ciudad no es la excepción.

El faltante de agua será la pregunta disparadora para hablar de políticas ambientales aunque hoy la prioridad es devolverle a la ciudadanía local y turistas el acceso a un derecho universal. 

En Necochea la problemática del agua recorre nuestros oídos desde hace temporadas, gestiones, funcionarios y nuestro presente no es la excepción sumado a la gran temporada que vivimos. 

En las redes sociales, portales de noticias, el diario local y en la calle la gente se queja y reclama hasta el cansancio para que vuelva el líquido inóculo. 

Pero nuestra ciudad no es el único caso de estos municipios que apuestan fuertemente al agro pero sueñan con ser mejores destinos turísticos. 

Pinamar, uno de los más exclusivos, y turísticos por excelencia, también fue noticia en los medios y días pasados entrevistaron a Bruno Nicolini, presidente de la cooperativa de agua y luz de esa ciudad fue el encargado de dar explicaciones acerca de los motivos que llevan a este faltante. 

El funcionario de la localidad vecina expresó que " se conjuga otra problemática que es la falta de presión originada por la ausencia, en muchos domicilios, de cisternas que permitan subir el agua a los tanques de reserva (ubicados en muchos casos en segundos pisos), algo que es obligatorio pero que no todos los vecinos cumplen incluso quienes prestan servicios y una actividad comercial". 

Asimismo entafizó Bruno, presidente de la cooperativa de Liz y Agua de Pinamar que "el problema no es que falte agua en sí, sino que la ausencia de cisternas determina una ausencia de presión que hace que, literalmente, no llegue el agua a los tanques. 

"En nuestra ciudad, por ejemplo, y el Artículo 10 del Reglamento General del Servicio Sanitario establece la “Obligación de viviendas con planta alta de tanque cisterna. Prohibido el uso de bombas directo a red”, algo que no todos los vecinos cumplen sintetizó el profesional. 

Cómo es sabido el uso irracional del agua es otra problemática que afecta gravemente la disponibilidad del recurso.

Los municipios de San Cayetano, al igual que el de Necochea, Pinamar, Tandil, Villa Gesell, Bahía Blanca, entre otros , se vieron en la obligación de emitir un comunicado oficial pidiendo a los vecinos que hagan un uso racional del agua. 

En muchos municipios para paliar la situación y fomentar el uso responsable, se prohíbe el riego durante el día, sin embargo existen muchos vecinos que o no son concientes de la situación o simplemente derrochan el agua regando, lavando el auto, o llenando piletas de agua que no cuentan con perforación propia lo cual también en muchos municipios es multado. 

Clarita la cuenta: ante un recurso finito como es el agua, el agua que derrocho en fines que no son de primera necesidad, es agua que le saco a mis vecinos. Y si se suceden los gobiernos y la problemática persiste, evidentemente estamos en un error de planificación de las ciudades y desarrollo de infraestructura.

¿Podrán los municipios sortear está gravísima situación? ¿ Será "El" desafío de la gestión de Arturo Rojas y la nueva Necochea? 

Para continuar con los ejemplos en Bahía Blanca, las autoridades también debieron salir a aclarar que “si bien todos los sistemas de captación, producción y distribución están funcionando al máximo de su capacidad, la demanda de agua se ha disparado resintiendo la operatoria".

Los bahienses han dado cuenta también de que la ola de calor y la sequía que atraviesa la región, junto con la creciente demanda, ha llevado a que barrios enteros se encuentren sin agua pese a que todos los pozos se encuentran operativos.

En conclusión, entre la necesidad de llevar a cabo mejoras estructurales en los servicios de agua y el incremento de la demanda propia de la época, se suman problemas puntuales como la excepcional sequía y ola de calor que atraviesa toda la provincia y la desaprensión o falta de cumplimiento de muchas disposiciones por parte de algunos vecinos, lo que genera una problemática que se hace sentir con fuerza en gran parte del territorio bonaerense, la escasez de agua.