

La agenda comienza este miércoles 14 a las 18:00 horas, cuando la antropóloga local Valeria Elichiry brindará la charla abierta “Las plantas nativas alimenticias y los humanos. Algunas historias del pasado y del presente de nuestra región”, tema de investigación de la profesional. ¿Qué es una planta nativa y cómo se define? ¿Cuál es el alimento oculto de la ciudad y qué usos se le dan hoy?, éstas y otras preguntas estarán en el debate. Se realizará en el salón Multiespacio con entrada libre y gratuita.
El sábado 17 a partir de las 12:00 horas y hasta las 17:00, en el auditorio, se llevará a cabo el Intercambio de Semillas y Plantas. Se invita a la comunidad a concurrir con plantas, gajos, semillas, bulbos, etc. a fin de intercambiar, liberar o regalar entre los presentes. Además de compartir experiencias relacionadas a la huerta urbana, la agroecología y la jardinería.
Se realizará un mapeo colectivo donde se podrán asentar los árboles frutales del barrio, casa y vereda, de la mano del espacio Bosque y Comunidad
También, desde la Plataforma de Arte en Territorio Bosque y Comunidad, "este mapeo se hará a través de la estampa de sellos. Además, los árboles frutales quedarán registrados en un libro, donde su historia podrá ser relatada", informaron.
A las 15:00 horas se dictará un taller de “Introducción al compostaje de residuos orgánicos” a cargo de Huerta Vivero Raíces.
El mismo sábado, habrá puestos de feria de emprendedores locales y el cierre estará a cargo de la Orquesta de Música Popular de la Escuela Provincial de Arte “Orillas del Quequén”. El evento es libre y gratuito.
Cabe recordar Necochea Ciudad Frutal es un colectivo agroecológico que promueve el desarrollo de huertas urbanas y la plantación de ejemplares frutales en espacios públicos. Trabaja en la ciudad desde 2012 promoviendo la agroecología y soberanía alimentaria a través de plantaciones en veredas y la generación de espacios comestibles comunitarios urbanos como la Hospihuerta del Hospital Dr. Emilio Ferreyra.
Pegamos a continuación una nota que se lanzó esta semana.
por Eva Cajigas
Necochea Ciudad Frutal es un colectivo autogestionado que promueve activamente la plantación de árboles frutales en espacios públicos y genera huertas comunitarias en la ciudad de Necochea, al sur de la Provincia de Buenos Aires, en Argentina.
El objetivo es la libre disponibilidad de alimentos sanos, sin agrotóxicos, para quien lo necesite. También promueve el intercambio de experiencias locales relacionadas al trabajo de la tierra, el fomento del autocultivo de alimentos con manejo agroecológico, la incorporación de especies y recursos en huertas urbanas y el embellecimiento de espacios ociosos.
Juan García y Eugenia Podlesny se iniciaron en esta aventura que comenzó hace casi una década con un limonero que pretendían tener en el fondo de su casa y para el que ya no había suficiente lugar. Por eso pensaron en colocarlo en el frente de la vivienda, consultaron normativas en la municipalidad y se entusiasmaron con una idea que pudiera ser replicada por los distintos barrios.
Necochea es conocida como la ciudad del viento pero este proyecto estimula la plantación de árboles con la consigna de “Dejemos de ser la ciudad del Viento, ¡Seamos la primer CIUDAD FRUTAL!”
La ciudad costera está en el medio de una zona de alta exposición de agrotóxicos, en los campos que rodean la ciudad balnearia se planta soja y es muy común ver cómo los aviones fumigadores pasan con su carga de muerte sobre los campos.
El proyecto surge con la iniciativa de plantar frutales y generar huertas orgánicas en lugares públicos a fin de generar alimento sano y gratuito para todas las personas, recuperando, al mismo tiempo, el arbolado urbano perdido que en esa ciudad ronda los 10.000 árboles.
Necochea Ciudad Frutal es un grupo de resistencia al avance sojero y se manifiesta plantando árboles frutales en las veredas de la ciudad.
En 2018 el colectivo lanzó una original iniciativa con la promoción de un concurso de huertas particulares urbanas en Necochea y Quequén premiando a los vecinos que produjeran sus propios alimentos de manera orgánica. Para autogestionarse preparan dulce con las frutas que recogen de los árboles y los venden en ferias.
Una muestra de su emprendedor activismo es la huerta del Hospital Municipal “Emilio Ferreyra” al que abastecen. Además enseñan a los niños a trabajar la tierra y a cocinar sus alimentos.
Necochea Ciudad Frutal es uno de los pocos grupos autogestivos de la Argentina que han decidido cambiar la realidad de la ciudad en la que viven. Saben que no tendrán ayuda oficial, pero esto es una ventaja porque tienen la puerta abierta para recibir la mejor ayuda: la de los vecinos y la de aquellos que entienden que una mejor alimentación depende de acciones directas que tomemos en nuestra vida, todos los días.
Alrededor de Necochea podrá haber miles de hectáreas sembradas de soja, pero dentro de la ciudad, un puñado de niños ya saben cocinar con las hortalizas que cosechan. La soberanía alimentaria está ganando una batalla en la ex ciudad del viento, y hoy Ciudad Frutal.