En una escalofriante jornada en la localidad bonaerense de Gregorio de Laferrere, La Matanza, un joven de 19 años, identificado como Lautaro Diego Emanuel Alvarado, se debate entre la vida y la muerte después de ser atacado a golpes por un grupo de jóvenes en las afueras del boliche "Cyrux".

🚨 ASÍ MATARON A LAUTARO
- El vídeo que revela la emboscada en la puerta de un boliche de Laferrere
- El autor de la patada asesina está identificado y prófugo. pic.twitter.com/RqCWKizguk

— Vía Szeta (@mauroszeta) November 8, 2023

El incidente ocurrió el pasado domingo, cuando una pelea que se originó en el interior del local bailable se trasladó a la Plaza Ejército de los Andes, a cien metros del establecimiento, después de que los involucrados fueran expulsados del lugar.

Según fuentes policiales, Lautaro formaba parte de un grupo de jóvenes que se vio envuelto en la confrontación, la cual culminó con la víctima recibiendo fuertes golpes en la cabeza hasta quedar inconsciente en el suelo.

Inmediatamente tras el incidente, Lautaro fue trasladado al Hospital Germani de Gregorio Laferrere y posteriormente derivado a la Clínica Mariano Moreno en Moreno, donde actualmente se encuentra internado en estado de muerte cerebral.

El parte médico de la clínica, dado a conocer por el doctor Alejandro Cilento, describe un cuadro grave: "Ingresó con un deterioro de la conciencia profundo". Las imágenes médicas revelaron múltiples contusiones a nivel toráxico, con una contusión pulmonar derecha muy grave y una contusión cerebral grave.

El fiscal Matías Folino, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Temática Homicidios Dolosos del Departamento Judicial La Matanza, ha iniciado una investigación sobre el incidente y ha ordenado medidas para la captura del agresor ya identificado.

En declaraciones desgarradoras, el padre de la víctima, Diego, afirmó que "nadie ayudó" a su hijo y que fue atacado por varios individuos. "Me lo mataron. Alguno fue el que le pegó una patada de atrás en la nuca y le quebró el cráneo. De una forma lo agarraron y lo tiraron al piso y otro le pegó", denunció.

Diego comparó la tragedia con el caso de Fernando Báez Sosa y describió a Lautaro como "todo un ejemplo" que ayudaba a su madre, salía poco y jugaba a la pelota. El último mensaje del joven a su padre, a las 3.30 de la madrugada, decía: "Quedate tranquilo, todo está bien". Un mensaje que hoy resuena con un tono desgarrador en medio de la incertidumbre y la tristeza que embarga a la familia.