

El asalto ocurrió mientras los padres de Martina disfrutaban de un día en la playa. Los ladrones, al percatarse de la presencia de la joven, la atacaron violentamente, dejándola con heridas en el rostro y provocándole un profundo trauma emocional.
El acto delictivo fue descubierto gracias a una amiga de Martina, quien presenció parte de la brutal agresión a través de una videollamada y alertó de inmediato a la madre de la víctima.
Los delincuentes se apoderaron de dinero en efectivo, prendas de vestir, alimentos y otros objetos de valor antes de darse a la fuga, dejando a la familia conmocionada y considerando abandonar la ciudad ante la sensación de inseguridad.
El caso ha sido caratulado como robo agravado, y la fiscalía 1 está investigando el suceso. Esta traumática experiencia ha llevado a la familia a replantearse su estadía en Necochea, dejando en evidencia la preocupación por la seguridad en la zona.