

En un comunicado oficial, la agrupación expresó su preocupación por las restricciones impuestas por el Protocolo del SENASA, las cuales dificultan la realización de actividades centrales de la fiesta, como el desfile y el entrevero de tropillas. Aunque respetan estas medidas, reconocen que estas limitaciones afectan significativamente el desarrollo del evento.
La difícil coyuntura económica que atraviesa el país también influyó en esta decisión. Conscientes de los desafíos financieros que enfrentan tanto los organizadores como los potenciales asistentes, se consideró inviable llevar adelante la Fiesta de las Tropillas en estas condiciones.
Sin embargo, la Agrupación reafirmó su compromiso de seguir trabajando para organizar actividades alternativas durante el año y anunció su determinación de regresar con una gran Fiesta el próximo año.