

En el marco del tercer aniversario de esta fecha emblemática, el país enfrenta una cruda realidad marcada por el desmantelamiento de políticas públicas destinadas a combatir la violencia machista. A esto se suma el reciente triple lesbocidio de Pamela, Mercedes y Andrea, mujeres que perdieron la vida a manos de otras mujeres lesbianas.
Los informes recientes sobre violencia de género revelan cifras preocupantes. Según La Casa del Encuentro, hasta el 31 de mayo de este año se registraron 127 femicidios, una cifra que no hace más que evidenciar la magnitud del problema. El Observatorio MuMaLa también aporta datos alarmantes, con 72 femicidios registrados hasta abril de 2024.
El informe de la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema de Justicia de la Nación revela un aumento del 11% en los femicidios durante el año 2023, con un total de 272 casos registrados. Estas cifras reflejan una tendencia preocupante y muestran que la violencia de género sigue cobrando vidas a un ritmo alarmante en Argentina.
Detrás de estas cifras frías se encuentran historias de dolor y sufrimiento. Cada femicidio deja a hijos e hijas sin madres, con el 63% de las víctimas siendo menores de edad. El 56% de los agresores eran parejas o exparejas de las víctimas, lo que pone de manifiesto la importancia de abordar la violencia en el ámbito doméstico.
Si bien los femicidios ocurren en todo el territorio nacional, Buenos Aires sigue siendo la provincia con más casos, seguida por Santa Fe, Chaco y Ciudad de Buenos Aires. Esta dolorosa realidad pone de manifiesto la urgente necesidad de implementar políticas efectivas para prevenir y erradicar la violencia de género en todas sus formas.
A medida que el país conmemora otro año de lucha en el Día Nacional del Ni Una Menos, es crucial recordar que esta batalla está lejos de terminar. Es responsabilidad de toda la sociedad trabajar juntos para construir un futuro donde todas las personas, independientemente de su género, puedan vivir libres de violencia y discriminación.