En la noche del viernes 22 de noviembre, un adolescente de Necochea, identificado como Axel Sandoval, fue brutalmente agredido en un conocido establecimiento nocturno de Claromecó, llamado "Calma Chicha". El joven, que se encontraba en el lugar con más personas y habría intentado intervenir en una pelea entre otras personas, pero terminó siendo víctima de un ataque feroz con un vaso de vidrio, lo que le causó heridas significativas en su rostro. Este episodio pone de manifiesto la violencia que persiste en ciertos espacios y la urgente necesidad de un llamado a la reflexión, y la justicia.

Un ataque violento en un local nocturno

Según lo narrado por la madre del adolescente, Mary Sandoval, el joven no estaba involucrado en la pelea, sino que intentó mediar para evitar un conflicto. Sin embargo, el agresor reaccionó violentamente y le propinó un golpe en el rostro con un vaso de vidrio. “Mi hijo los quiso separar y este señor agarró un vaso de vidrio y le dijo vos qué te metés y se la dio de lleno y así lo dejó. Le destruyó la cara, la basura humana”, expresó Mary, quien está consternada por la brutalidad del ataque.

Este incidente tuvo lugar en el local "Calma Chicha", un pub que, tras la agresión, fue clausurado por el Organismo Descentralizado de Claromecó debido a la violación de las normativas, como la presencia de menores y el incumplimiento de horarios permitidos para su funcionamiento.

La denuncia y el llamado a la justicia

El caso de Axel ha desatado una fuerte ola de indignación en la comunidad local y en las redes sociales, donde su madre ha hecho un llamado urgente para que este hecho de violencia no pase desapercibido. A través de un post viralizado, Mary Sandoval exigió justicia, pidiendo que el agresor enfrente las consecuencias de sus actos: “Quiero que se haga viral, por favor difundir, muchas gracias, quiero justicia, quiero que pague por todo lo que está sufriendo mi hijo, lo quiero preso!!!!”.

En un video que rápidamente se hizo viral, Axel también pidió visibilidad para su caso, destacando la gravedad del ataque y exigiendo que no quede impune. “Yo soy Axel Sandoval. Me comunico con ustedes con el fin de que esta noticia sea viral, para que esto no vuelva a suceder... Quiero justicia por mí y para que esto no vuelva a pasar”, expresó el joven, visiblemente afectado por la experiencia.

Afortunadamente, Axel está en proceso de recuperación, aunque aún se encuentra emocionalmente afectado por lo sucedido. Las heridas en su rostro son visibles y han causado un gran impacto en su familia y en la comunidad. La denuncia policial ya fue radicada y las autoridades competentes, con la intervención de la Fiscalía de Tres Arroyos, continúan investigando el caso.

El caso de Axel no solo se trata de un hecho aislado, sinoque es producto de una realidad que nos debe llamaer a la reflexión y a la acción. La violencia debe ser erradicada y quienes cometen actos de agresión deben rendir cuentas por sus acciones.