

En su relato, Brisighelli hace especial hincapié en el vínculo profesional establecido con Hugo Obregoso, de Alon-Car, y en la importancia de las relaciones de colaboración que han permitido el crecimiento conjunto en Puerto Quequén. Estas alianzas, que incluyen a actores clave de la comunidad portuaria, han sido esenciales para garantizar la seguridad, eficiencia y sostenibilidad de las operaciones diarias en el puerto.
Open Sea, como proveedor integral de soluciones, se destaca por su atención personalizada a las embarcaciones y sus tripulaciones. La empresa, que actúa como representante local, tiene un papel fundamental en el proceso de amarre y desamarre de buques, asegurando que cada operación se realice con la máxima profesionalidad y bajo las estrictas normativas de seguridad. El servicio comienza cuando el Práctico informa sobre la aproximación de un buque, momento en el que los amarradores se ubican en tierra y en embarcaciones cercanas al muelle. Utilizando cuerdas lanzadas desde el buque, se asegura el atrque bajo la supervisión constante del Práctico, garantizando la seguridad de las maniobras.
A través de este capítulo, Puerto Quequén refuerza su compromiso con el desarrollo de un puerto más eficiente y moderno, que no solo sea un motor económico para la región, sino que también mantenga una relación cercana y colaborativa con su comunidad. Este enfoque de trabajo conjunto es un pilar esencial en la gestión del puerto, que continúa proyectándose como un modelo de sustentabilidad y eficiencia en la actividad portuaria.
La serie Comunidad Portuaria sigue poniendo en evidencia el valor del trabajo colectivo y la importancia de las alianzas entre empresas, profesionales y actores locales para fortalecer la actividad portuaria y la economía de la región.