En la madrugada del sábado, dos conductores dieron positivo en los controles de alcoholemia realizados en distintos puntos de la ciudad, lo que derivó en el secuestro de los vehículos y la retención de las licencias de conducir.

El primer incidente ocurrió en la intersección de las calles 18 y 55, donde un Volkswagen Fox fue detenido en un operativo de tránsito. El conductor arrojó un resultado de 1.39% de alcohol en sangre, superando ampliamente el límite permitido. Como consecuencia, el vehículo fue secuestrado y trasladado al predio de Tránsito por Grúas Trave, mientras que se le retuvo la licencia al conductor.

El segundo control tuvo lugar en la Circunvalación y Ruta 88, donde otro automóvil fue interceptado por la Policía Vial de Quequén. En este caso, también se detectó un alto nivel de alcohol en sangre en el conductor, lo que motivó el secuestro del vehículo y la retención de su licencia de conducir.

Ambos operativos forman parte de los esfuerzos de las autoridades para garantizar la seguridad vial en la ciudad, especialmente en esta época de fiestas y celebraciones. La Policía, junto con el personal de Tránsito y Grúas Trave, continúa trabajando para prevenir accidentes y promover la conciencia sobre los peligros de conducir bajo los efectos del alcohol.