

Actualmente, los trabajos se concentran en calle 45 entre 78 y 80, pero se extenderán a toda la cuadrícula comprendida entre la Avenida 74 y la 86, desde 41 hasta 45, y también en el frente del Jardín de Infantes Nº 918.
El subsecretario de Obras Públicas, Lisandro Dones, visitó los trabajos en curso y destacó la importancia de la obra para la zona.
“Después de muchos años de reclamos llegamos con una obra a esta gran barriada que no solamente mejora la transitabilidad, sino también, y sobre todo, el desagüe de las lluvias”, aseguró Dones. Además, explicó que “lo que hace el cordón cuneta es conducir las aguas para su rápido escurrimiento y evitar la acumulación los días complicados”.
La obra, que está a cargo de la Secretaría de Planeamiento, Obras y Servicios Públicos, es financiada a través de recursos tanto provinciales como municipales, y la inversión total supera los 50 millones de pesos, que se destinan tanto a los trabajos de cordón cuneta como a la mejora de los desagües pluviales en áreas críticas de la ciudad.
“Arturo (Rojas) va administrando los recursos y tratando de ir solucionando los problemas que se van generando, así como los reclamos históricos que tiene la ciudad”, afirmó Dones, destacando la importancia de abordar los problemas de infraestructura que se arrastran desde hace años.
En cuanto a los desagües pluviales, Dones explicó que la obra incluye la construcción de drenajes en áreas donde se presentan más conflictos durante las lluvias intensas, como en la calle 80 entre 43 y 41, donde se instalarán cuatro sumideros para mitigar las inundaciones.
“Creo que es una obra importantísima, que suma y es parte de un plan de inversión que tiene Arturo de acá para los próximos meses”, concluyó el subsecretario, anunciando que después de finalizar en el Barrio Mataderos, un proyecto similar comenzará en la Avenida 531 de Quequén, completando una obra histórica que había quedado inconclusa.