La ola de robos en Necochea no da tregua. En esta ocasión, la víctima fue una camioneta Chevrolet S-10 gris, patente EBP-214, que fue sustraída en la noche del martes frente a una vivienda ubicada en la calle 52, entre 61 y 63. Los propietarios del vehículo, Patricio Latorre y Micaela Suriano, iniciaron de inmediato la búsqueda y visibilización del robo, pidiendo la colaboración de la comunidad para dar con el paradero de la camioneta.

El robo ocurrió alrededor de las 21 horas, cuando los dueños no se encontraban en su hogar. Al regresar, se dieron cuenta de la desaparición del vehículo y radicaron la denuncia ante la policía. Inmediatamente se implementaron operativos de búsqueda, pero fueron los mismos afectados quienes decidieron tomar la iniciativa de intensificar los esfuerzos, recurriendo al sistema de cámaras de seguridad del municipio y a las redes sociales para solicitar cualquier información sobre el paradero de la S-10.

Búsqueda en cámaras y redes sociales

La familia se puso en contacto con el centro de monitoreo de Necochea para revisar las cámaras de seguridad, pero lamentablemente no se lograron obtener imágenes claras del lugar exacto del robo. “Las cámaras están buscando la camioneta, pero no hemos podido obtener registros que nos ayuden a identificar el momento en que ocurrió el robo. En ese momento estábamos en una cancha y no nos dimos cuenta hasta que regresamos a casa”, explicó Micaela Suriano.

Además de contactar a las autoridades, los propietarios de la camioneta comenzaron a difundir fotos del vehículo en redes sociales, con la esperanza de que alguien pueda aportar información que conduzca a la recuperación del rodado.

Preocupación vecinal por la inseguridad

Este nuevo robo ha encendido las alarmas en los vecinos de la zona, que advierten sobre la falta de iluminación en algunas calles cercanas y la creciente inseguridad en la localidad. Varios residentes mencionan la presencia de propiedades usurpadas en la zona, lo que ha generado un clima de temor entre quienes habitan en el área.

El caso está siendo investigado por la Fiscalía Nº 20, mientras la policía local sigue con los operativos en diversos puntos de la ciudad. Sin embargo, la búsqueda del vehículo continúa sin avances significativos, y la familia de Latorre y Suriano sigue esperando noticias.

Este hecho refuerza la preocupación generalizada por la inseguridad en Necochea, donde los robos se han vuelto una constante. La comunidad pide mayor vigilancia y medidas de seguridad para frenar el aumento de delitos en la ciudad.