Victorio Perdighe, estudiante de derecho y militante en la Juventud Peronista fue detenido-desaparecido el 16 de diciembre de 1976 en La Plata y visto en el campo de concentración “La Cacha”. Su esposa, Graciela “Chela” Sagües fue secuestrada en la misma ciudad el 22 de enero de 1977 mientras caminaba por la calle y fue vista en la comisaría 5ª de La Plata, en el Pozo de Arana, en la Brigada de Investigaciones y el Pozo de Banfield. Victorio fue asesinado durante un falso enfrentamiento y de Graciela no se supo más. Tenían una nena, María Elena, quien escribió para NdeN estas palabras: 

"Este año nos quedamos en casa. Lo que más voy a extrañar son los gritos del final, cuando dicen el nombre del  desaparecido y todos los que estamos en la plaza gritamos ¡PRESENTE! Se hace todos los años y siempre me emociona, busco las caras de quienes han querido mucho a mí mamá y nos damos un abrazo. Me voy a mí casa pensando que por un rato entre todos juntos la trajimos y estuvo presente.

Habitualmente los 24 de marzo pienso un rato largo qué me voy a poner para ir a la plaza. No es una cuestión de coqueteria sino debatirme entre morirme de calor al principio y estar abrigada a la hora que termina. Los que me conocen saben que necesito anticiparme a todo. Como si eso me salvará de algo... llego siempre corriendo, porque vivo corriendo aunque sea un feriado y busco a alguien de la Comisión que, con una sonrisa me cuenta, si este año llevamos antorchas, velas o pancartas. Saben que no milito en nada, que mí compromiso con ellos es poco, que soy hija de desaparecidos a mí manera y que valoro el inmenso laburo q llevan adelante".

 ¡CHELA SAGüES Y VÍCTORIO PERDIGHE PRESENTES! 
 ¡AHORA Y SIEMPRE! ¡AHORA Y SIEMPRE!.