La semana pasada informábamos desde NdeN la visita que habían realizado altos funcionarios nacionales de la Secretaría de Energía, en el Puerto Quequén, en el marco de la aprobación para que la empresa multinacional Equinor realiza inspecciones sísmicas en el MAr Argentino para, de hallar, instalar plataformas de extracción petrolífera al fondo del mar. Actualmente dicha aprobación esta trabada por medidas cautelares ambientalistas.

En ese sentido, en el SUM del Consorcio de Gestión de Puerto Quequén y gestionado por "Pampa" Alvaro, se realizó una "charla informativa" sobre el “Proyecto de exploración y producción petrolífera en aguas profundas del litoral bonaerense”. Participaron de la misma Aldo Duzdevich, asesor del Secretario de Energía de la Nación, además del Presidente de Puerto Quequén, Jorge Alvaro, y acompañado por el ingeniero Pablo López, director de la carrera de Ingeniería en Petróleo de la UNAJ y consultor técnico de la Subsecretaría de Hidrocarburos; y la ingeniera Silvia Corral, coordinadora de Exploración de Hidrocarburos de la Subsecretaría de Hidrocarburos,

Según el informe al que pudo acceder NdeN, para fundamentar el avance aprobado por el gobierno, Duzdevich resaltó que “de concretarse el proyecto, se crearían entre 10 y 15 mil puestos de trabajo para la ciudad”, según resaltaron a NdeN desde el Puerto Quequén.  “El sector tiene una altísima calidad de trabajo. No podemos despreciar ninguna actividad para generar empleo, nuevas empresas y nuevas industrias”, remarcó.

Según agregó el informe del Puerto, "el mayor potencial de impacto directo sobre la cadena de valor local se presenta en la siderurgia, metalmecánica, astilleros, logística, construcción, servicios profesionales, transporte de cabotaje y transoceánico, y aprovisionamiento de combustibles".

Durante la jornada informativa Pablo López explicó que “el pozo que se hará se llama Algerich. Está situado a 307 km de Mar del Plata y 320 km de Necochea, dentro de un área en la que años atrás YPF hizo los estudios de sísmica y la interpretación de datos”.

Respecto al "potencial energético" de la propuesta, Aldo Duzdevich reforzó: “Se calcula que allí hay un mega yacimiento, equivalente a la producción de YPF en toda Argentina. Estamos hablando de 200 mil barriles diarios, que serían 7.300 millones anuales de producción. Existen en la cuenca 20 sitios estudiados que potencialmente podrían tener esa dimensión”.

López explicó que las energías renovables y la evolución del consumo energético, proyecta al gas y el petróleo como los protagonistas de la matriz mundial hasta 2050" y en ese marco, destacó: "contar con recursos hidrocarburíferos convencionales propios será importante para abastecer la demanda doméstica y global”.

Off Shore

Puerto Quequén afirmó que la extracción de petroleo offshore representa a nivel global el 30 por ciento de la producción mundial de hidrocarburos y "el mar argentino es una de las fronteras  exploratorias más extensas del mundo", expresaron desde el Puerto a NdeN. Y argumentaron que el propio Puerto Quequén "se posiciona como la mejor opción por su cercanía al punto de extracción y su mejor predisposición social e institucional". Y compararon con otros puertos, asegurando que existe una "pequeña ventaja" respecto a  los puertos de Mar del Plata y Bahía Blanca; aunque Necochea y Quequén "no resultan tan convenientes por los pocos servicios e industria de su zona de influencia".

Impacto ambiental

En lo que contó a NdeN el Puerto Quequén, aseguran que "as tareas costa afuera se realizan con el  máximo nivel de seguridad de la industria, con especial dedicación en la protección de las personas, el medio ambiente y el entorno local". Asímismo el asesor del Secretario de Energía de la Nación, Aldo Duzdevich, reafirmó que “el Estado nacional tomó todos los recaudos necesarios respecto del impacto ambiental”.

La coordinadora de Exploración de Hidrocarburos de la Subsecretaría de Hidrocarburos, ingeniera Silvia Corral, expresó que “en la fase exploratoria, se realiza, frente a las costas de Necochea, a una distancia de 300 kilómetros, una prospección sísmica, para investigar las posibilidades de existencia de hidrocarburos”.

“Un barco, a muy baja velocidad, emite ráfagas de aire comprimido con un volumen de 200 a 220 decibeles, generando energía acústica que se refleja en las capas del subsuelo para luego ser captada por los receptores arrastrados por el buque”, describió la ingeniera y explicó que recolectada la información, se tarda aproximadamente un año en procesarla para decidir si se realizará el pozo exploratorio, una perforación mínima y con una geolocalización de alta precisión, para determinar efectivamente si hay o no hidrocarburos.

Asimismo, Corral hizo hincapié en que “el sonido emitido por los trabajos de sísmica es equivalente a los de una hélice de un buque carguero como los que operan en Puerto Quequén. Por lo que el impacto sonoro de la actividad es el normal”.

Respecto de la protección de la fauna marina, detalló que “se produce una zona de exclusión de mil metros alrededor del barco. A su vez, a bordo, en la popa y la proa, van observadores, biólogos entrenados, que se suman a los radares, para avistar animales y en ese caso detener la operación. Además, el sonido comienza con un volumen suave y va aumentando paulatinamente, para que los animales que estén cerca puedan alejarse”.

Finalmente, Aldo Duzdevich, aclaró que “esta clase de estudios se realiza hace más de 50 años en el mar argentino. Ya hay 300 mil kilómetros de líneas sísmicas estudiadas; y toda la posible explotación en el mar bonaerense se da a distancias mayores a los 300 kilómetros, por lo que nadie ve la existencia de las plataformas desde la costa”.